El Inquilino – El Arte de Ensoñar
En este capítulo, don Juan Matus informa a Carlos Castaneda que su instrucción formal en el ensueño ha terminado, pero que debe esbozar la cuarta puerta del ensueño. Lleva a Castaneda a un pueblo en el sur de México para una lección final, que será impartida por un visitante misterioso. Este visitante resulta ser el «inquilino», un antiguo hechicero también conocido como el desafiante de la muerte. Castaneda se ve abrumado por el pánico y la repulsión al descubrir que el inquilino, a quien había conocido previamente como un hombre, es ahora una mujer. Don Juan explica que para un hechicero tan poderoso, el género es una cuestión de elección, que se logra al desplazar el punto de encaje. Castaneda debe ahora enfrentarse al inquilino a solas para tomar una decisión sobre aceptar o rechazar los «dones de poder» del inquilino, una elección que cada nagual de su linaje ha tenido que hacer.